Hoy conmemoramos el miércoles 14 de diciembre de 1988 cuando se convocó por parte de los dos sindicatos mayoritarios; CCOO y UGT una huelga general contra una reforma en el mercado laboral que permitía el abaratamiento del despido y la introducción de contratos temporales para los jóvenes trabajadores.
El 14 D se convirtió en una movilización de descontento con la política económica del momento y sus continuas reformas en beneficio de la patronal.
Con un seguimiento masivo de la población, el país se paralizó durante 24 h, obligando así al gobierno a negociar con los sindicatos.